anti rutina

una visita del chico reef a la oficina, como mucho 10 minutos, él me da sus besos a escondidas, a una pared de mis compañeros de laburo, me mete la mano en el escote, me agarra con fuerza y me muerde, me abraza y me deja su perfume. me mira desde arriba con sus ojos chinos por las pocas horas de sueño y, además de derretirme, me borra en un segundo los nudos en la garganta y los enrosques y me abraza y me besa y se va, y yo me quedo contenta.






pd. técnicamente ya no podemos decirle más chico reef, pero bué.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

que bueno eso de las visitas anti rutina
y me gusta que a veces yo soy parte de esas visitas

gabiel dijo...

oh my gosh, she said mano en el escote, donde quedó la decencia? Tápenle los jojos a los ene-i-enie-o-ese urgentemente!

marisel dijo...

te podrias haber ganado la afeitadora phillips