my tears dry on their own

después de los últimos dos posts fatalistas (llegarán más?) vuelvo al blog porque soñé
que se me caía un pino muy alto arriba mío y de mis primos.
así como lo oyen, un pino nos aplastaba organizadamente a todos pero sobrevivíamos.
la supervivencia es una temática recurrente en mi vida onírica de los últimos días en los que las adversidades se representaron en forma de robos, derrumbes y situaciones tenebrosas (en mis sueños eh)
como dato absurdo, hoy, que mis horas de sueño fueron reiteradamente interrumpidas, apareció martín palermo en uno de los sueños y me abrazaba, pero sin romanticismo, como un amigo.

parece a propósito, pero en vísperas del día del amigo mis queridísimas están tomando el protagonismo de mis días, así son las circunstancias.
hoy me llamó katia desde roma, qué emocionante puede ser la distancia y el amor que va intercontinentalmente cuando más lo estás necesitando.

tengo tantos clichés en la cabeza, que prefiero dejar esto acá, no sin antes mencionar que amy winehouse llegó a mi vida para cantarme la justa.

1 comentario:

Lola dijo...

amy es inexplicable.