the house song

el monitor de esta compu hace un zumbido muy similar al famoso zumbido del cansancio, vieron? ese piiiiiiiii que a veces todos tenemos en la cabeza.
entonces me pone mal tenerlo encendido, trato que el volumen de la música lo sobrepase pero no hay caso.
anoche fuimos a una fiesta y vi a mucha gente que iba a mi colegio.
esa sensación de cofradía nacionalbuenosairense es densa -pienso- , pero me re cabe.
de mi grupo de amigas no hay ni una que no haya tenido un novio del colegio, más grandes o de nuestro año (bueno, hola!). la conexión intergeneracional es rescatable. me acuerdo de entrar en primer año y mirar a 'los más grandes' y ahora cruzarlos en todos lados con la distancia de la edad semi aniquilada. es loco. me re cabe pero al mismo tiempo valoro mucho a mis amigos extra-cnba.
el colegio ya no es parte de mi presente pero mis círculos sociales están definitivamente condicionados por él. hasta en mi laburo (sí, en la radio) encontré a una ex alumna.
en fin, es extraño esto.

creo que estoy amando este domingo porque hace una semana estaba llorando colapsada por vayamos a saber bien qué, con una radiografía de mi pie derecho en la mano, sin poder entrar a mi casa porque no me funcionaba una llave. parecía una sucesión de desgracias y no haber podido entrar a mi casa ya era demasiado. seguí llorando un poco en la escalera, en la terraza, hasta que me acordé que a la vuelta de mi casa (plenobarriodecoghlan) abrieron un coffe shop muy lounge y me fui a tomar un café ahí esperando que mi papá viniera a rescatarme.
me senté en una mesa redondita para dos en medio de otras mesas muy llenas y estuve una hora observando a un señor con un sorprendente parecido a Galeano. sería Galeano posta? bueno, y con eso me entretuve.

estoy tirada en la cama leyendo el radar, pensando en lo culturalmente 'elevado' que es ese suplemento o en lo culturalmente aturdida que estoy yo. o nosé, pero soy poca cosa para vos, radar, tus notas son muy buenas!