la ofi-vida

enero, mes de vacaciones -para algunos-
primero me fui yo, ahora se fue mi compañero y quedé alone con mi 'boss' (la jerarquía es relajada aquí)
la vida en la oficina se desaceleró, entramos en una sintonía muy armónica, nosé, relajación?
el ritmo de estos días arranca a las 11 am (no me puedo quejar)
hoy, viernes lluvioso, llegamos ambos muy dormidos y no había internet (!!)
nos miramos con cara de ¿y ahora qué?
la chica fibertel me dice que se cayó el sistema en la zona.
okey, pongo música.
al ratito se arregla y empezamos con la normalidad de la jornada, pero nos cuesta.
desayunamos? dale, hago dos tés de manzanilla, sí, por favor.
nos dispersamos charlando.
hablamos de currículums vitae (recibimos varios en esta época del año, y nos reímos de algunos que mandan unas fotos que...nose, no se entiende qué función cumplen o buscan)
recordamos el día en el que me entrevistó y ni quizo leer mi currículum.
hablamos de nuestro paupérrimo nivel de inglés y él me dice jewel, little old lady (sic)
recordamos el secundario (lejanísimo para él, algo lejano ya para mí)
hablamos de llevarnos materias, de machetearnos, de los profesores, de todo.
recorremos la oficina y pensamos en cómo reacomodar las cosas para este año, qué comprar, qué mover, qué sacar.

en pocos días se cumple un año desde que estoy trabajando acá y me genera un poco de emoción. estoy encariñada y contenta de saber que pueden proliferar buenos vínculos en un ámbito laboral, donde la convivencia es buena, y la comodidad reina.
me gusta también cuando estamos todos acelerados y corriendo de acá para allá, cuando hago algo mal y me lo dicen, cuando hago algo bien y también me lo marcan.
en fin, es eso, la ofivida me invade por completo cinco horas por día, de lunes a viernes, y no me puedo quejar.
hay otra vida igual, la extraofivida, que tambien da que hablar.

2 comentarios:

agustín dijo...

http://www.infobae.com/notas/nota.php?Idx=275799&IdxSeccion=100799

esto es tal vez lo mejor que haya hecho infobae

tatatata dijo...

me transmitiste mucha calidez. me dieron ganas de trabajar en una oficina. de verdad